¿Disfunción eréctil? ¿A qué especialista acudir?
¿Te cuesta conseguir una erección? ¿Sientes que tus erecciones han perdido firmeza? ¿Te sientes nervioso antes de iniciar un encuentro sexual? ¿O te ha pasado perder la erección la última vez que hiciste el amor con tu pareja y desde entonces tienes miedo de que esta situación se repita? ¿No sabes si sufres de disfunción eréctil? ¿Tienes dudas sobre a qué especialista debes acudir?
¿Qué es la disfunción eréctil?
La disfunción eréctil se ha definido como la dificultad o incapacidad permanente o recurrente para lograr o mantener una erección lo suficientemente firme que permita iniciar o mantener una relación sexual con penetración el tiempo necesario para considerarse como satisfactoria.
¿Qué síntomas tiene la disfunción eréctil?
Existen tres síntomas a tener en cuenta para su diagnóstico:
- Dificultad para conseguir una erección durante el encuentro sexual.
- Dificultad para mantener la erección hasta finalizar la actividad sexual.
- Reducción marcada de la rigidez de la erección.
Si tienes al menos uno de estos síntomas en casi todas o todas las ocasiones de actividad sexual (es decir si te ocurre entre un 80% y 100% de las veces) y esta situación te provoca un intenso malestar o está afectando a tu relación de pareja, podría tratarse de una disfunción eréctil.
¿Por qué se produce la disfunción eréctil?
Los problemas de erección, son una de las dificultades más frecuentes en los hombres, siendo la EDAD el factor de riesgo más importante, pudiendo afectar al 20% de los jóvenes mayores de 25 años y alcanzar hasta un 50% de los hombres mayores de 60 años.
La combinación de factores médicos o psicológicos suelen ser la causa de esta disfunción;
Entre las causas físicas u orgánicas más frecuentes podemos encontrar:
-Vasculares: la obstrucción de las arterias que irrigan los genitales, impiden la vasocongestión de los mismos durante la excitación causando problemas de erección.
Se estima que entre el 60-80% de los factores orgánicos pueden deberse a la arteriosclerosis, la diabetes, la hiperlipemia, la hipertensión arterial, la insuficiencia renal o la cirugía pélvica.
La vida sedentaria, la obesidad y por supuesto el consumo de sustancias como el alcohol, el tabaco y las drogas se presentan como factores de riesgo.
-Neurológicas: las lesiones en la médula espinal altas, medias o bajas afectan en diferente grado a la excitación o a la respuesta del orgasmo. Suelen ser el 10-20% de las patologías orgánicas.
-Hormonales: el exceso de estrógenos, las hiperprolactemias, los hipogonadismos, las disfunciones tiroideas y las disfunciones suprarrenales equivalen al 5-10% de las causas físicas.
-Fármacos: algunos medicamentos con acción hormonal que disminuyen la acción de la testosterona o que aumenten los niveles de prolactina.
Fármacos antipsicóticos y neurolépticos, así como antidepresivos.
Y fármacos antihipertensivos como bloqueantes beta-adrenérgicos o diuréticos.
Entre las causas psicológicas más frecuentes podemos encontrar:
Estrés, ansiedad sexual, escasa educación sexual, problemas de pareja y experiencias sexuales traumáticas.
¿A qué especialista acudir?
¿Te identificaste con las causas físicas o psicológicas? En los siguientes párrafos tendrás una guía para saber a qué especialista debes acudir para solucionar tus problemas de erección.
1. ¿Cuándo acudir a un médico/a?
Si sospechas de una causa física, de una enfermedad o de alguna medicación que puede estar afectando a tus erecciones, debes acudir a tu médica/o de cabecera para que te realice las pruebas pertinentes o bien te derive al servicio de Urología con el objetivo de conseguir el tratamiento más idóneo para ti.
Aun así, es importante que consideres iniciar una terapia psicológica/sexológica, ya que esto te va a permitir:
– Trabajar el impacto que produce esta disfunción en tu autoestima.
– Trabajar el impacto en tu relación de pareja, ya que es posible que tu compañero/a de vida también necesite ayuda.
– Adquirir herramientas que te permitan potenciar el repertorio de tu vida erótica para seguir disfrutando de la misma.
Además, es importante que evalúes tu situación personal y de salud general para decidir si realmente deseas tomar medicación o bien realizar un procedimiento quirúrgico antes de someterte al mismo.
Tienes que saber que culturalmente la erección masculina y la práctica de la penetración se asocia a mayor placer en las relaciones sexuales, pero esto no es más que un mito.
La realidad es que, a lo largo de tu vida, va a ser completamente normal que tengas problemas para conseguir o mantener una erección (porque esto depende de muchísimos factores) pero ten presente que aunque no tengas una erección completa, esto no te impide seguir disfrutando de tus orgasmos.
La disfunción eréctil no indica el fin de tus encuentros eróticos, adapta tu vida sexual a nueva esta realidad y disfrutarás de ella para siempre.
2. ¿Cuándo acudir a un sexólogo/a?
Si ya has descartado una causa física y sospechas de una causa psicológica, puedes acudir directamente a un profesional de la psicología/sexología.
Es muy probable que se trate de un problema psicológico, si tienes en cuenta algunos de estos indicadores;
-Tienes menos de 39 años.
-Tu libido ha disminuido.
-Tienes erecciones matutinas.
-Tus problemas de erección comenzaron de manera brusca, de un encuentro sexual a otro.
-Al masturbarte, no tienes ningún problema para conseguir ni mantener una erección.
-Tienes dificultades de erección con una persona, pero no con otra.
-Tuviste un encuentro que no salió como esperabas, y desde entonces sientes miedo de que te vuelva a ocurrir.
-Te pones muy nervioso incluso mucho antes de comenzar una relación sexual.
-Acabas de conocer una pareja nueva.
-Piensas todo el tiempo en cómo satisfacer a tu pareja.
-Evitas o buscas excusas para no tener un encuentro sexual.
Si te has visto identificado con algunos de estos puntos, continúa leyendo porque voy a explicarte con mayor detalle qué es la ansiedad sexual por tratarse de uno de los factores psicológicos más frecuentes en consulta que causa problemas de erección.
¿Qué es la ansiedad sexual?
La ansiedad es un mecanismo de defensa cuyo objetivo es alertarnos de que esa situación que estamos viviendo ahora mismo, puede suponer un riesgo para nuestra supervivencia y debemos alejarnos de allí.
Por ejemplo, la sensación de miedo que experimentamos si un perro nos ladra y corre hacia nosotros a gran velocidad, va a disparar adrenalina en nuestro torrente sanguíneo para que salgamos corriendo, evitando que el perro nos alcance.
El miedo y la ansiedad son emociones normales que nos protegen del peligro, activan nuestras extremidades para atacar o salir corriendo, poniendo énfasis en salvar nuestra vida y desconecta la función sexual puesto que en ese momento no es primordial para nuestra supervivencia.
El problema viene cuando nuestro cerebro no diferencia entre una amenaza real y otra ficticia.
La ansiedad que se produce antes o durante la relación sexual es la que definimos como ansiedad sexual porque inspira temor a la persona y no le permite relajarse y disfrutar de su vida erótica.
La persona que siente ansiedad sexual vive los encuentros sexuales con mucha preocupación y nerviosismo, por lo que con el tiempo usa todo tipo de estrategias para evitarlas o posponerlas.
¿Cuáles son los síntomas de la ansiedad sexual?
Aunque cada persona puede manifestar características concretas y personales, los síntomas más habituales suelen ser:
-Pensamientos rumiantes en torno al desempeño sexual.
-Dificultar para respirar o respiración entrecortada
-Boca seca
-Sudores
-Taquicardia
-Mareos
-Temblores
-Tensión cervical
-Sensación de irrealidad, de no estar presente
¿Cuál es el origen de la ansiedad sexual?
La ansiedad sexual puede aparecer a raíz de una situación incómoda y permanecer por largos periodos de tiempo o bien manifestarse cuando experimentamos con una nueva pareja sexual.
¿Recuerdas la primera vez que, siendo pequeño, pusiste la mano en una estufa encendida y te quemaste?
Este es un ejemplo de lo que en Psicología se llama “aprendizaje por un único ensayo”. Es decir, que los seres humanos no necesitamos repetir muchas veces la experiencia para aprender la lección, con una vez es suficiente.
Desgraciadamente, la sexualidad también puede verse afectada por este tipo de aprendizaje.
Es decir, una sola experiencia negativa puede influir para que una persona busque la manera de evitar tener relaciones sexuales en el futuro.
Las causas psicológicas de los problemas de erección suelen darse justo después de un encuentro disfuncional; si viviste un episodio problemático, tenderás a auto-observarte minuciosamente en el próximo encuentro sexual, lo que impedirá que te relajes y que la ansiedad crezca, favoreciendo nuevamente la pérdida de la erección.
Los problemas de erección de origen psicológico aumentan cada día; el estrés diario y las expectativas irreales de lo que “debería ser” una relación sexual afectan a hombres de todas las edades.
Tipos de ansiedad sexual
En líneas generales existen dos tipos principales de ansiedad que afectan negativamente a la vida sexual de muchas personas; el miedo al rechazo y el miedo al fracaso.
1. El miedo al rechazo tiene que ver con nuestra autoimagen y autoestima;
Si nos sentimos incómodos con nuestro cuerpo o con nuestros genitales, si tenemos algún complejo, si tenemos miedo de que nuestra pareja no nos encuentre atractivos o no nos desee sexualmente.
O bien si tenemos sentimientos de vergüenza o inferioridad y nos molesta que nuestra pareja nos vea desnudos.
El miedo al rechazo puede desarrollarse en nuestro interior cuando nuestra voz interna formula juicios negativos acerca de nuestro cuerpo o se compara con otros.
O bien desde el exterior cuando alguien que nos gusta nos ignora, nos rechaza o nos hace comentarios negativos sobre nuestro cuerpo.
2. El miedo al fracaso tiene que ver con la ansiedad que se produce por la ejecución del acto sexual en sí mismo;
Ansiedad porque la relación sexual no salga bien o no sea satisfactoria. Por no saber cómo actuar, por pensar en que podemos decepcionar a nuestra pareja. Por estar más atento a tu erección que al encuentro en sí mismo.
El miedo al fracaso generalmente afecta a personas sexualmente inexpertas, a personas extremadamente ansiosas por complacer a su pareja; y también a las personas que han sido criticadas por su pareja sexual en razón de su incapacidad de satisfacerles sexualmente, por su falta de deseo o de respuesta sexual, o bien por cualquier otro aspecto de su sexualidad.
¿Cómo se trata la ansiedad sexual en consulta?
Si tienes dificultades para lograr o mantener una erección y la ansiedad esta afectando a tu desempeño sexual, la terapia se desarrolla en los siguientes pasos:
Lo primero que aprenderás es que la terapia es un proceso que lleva un tiempo y exige trabajo y compromiso por tu parte.
En segundo lugar, conocerás cómo funciona el cuerpo humano y cómo influye el estrés y la ansiedad a nivel hormonal en tu vida sexual.
En tercer lugar, aprenderás a conocerte mejor dejando atrás mitos y tabúes acerca de la sexualidad que has heredado de una cultura coitocentrista, lo que te permitirá trabajar con expectativas más realistas sobre tu vida erótica y sobre tu relación de pareja.
La terapia sexual va mucho más allá de los genitales, trabajando actitudes, emociones y valores fundamentales para el desempeño integral de la persona.
En cuarto lugar, aprenderás técnicas y herramientas para aplicar y reducir tu nivel de ansiedad ante un encuentro íntimo, así como ejercicios prácticos para mejorar la firmeza de tus erecciones.
Por último, trabajaremos en la recuperación de tu autoestima y en aumentar la satisfacción en tu relación de pareja.
Culturalmente las dificultades sexuales se asocian al miedo y a la vergüenza, lo que impide la consulta con diferentes profesionales y por ende la solución rápida y efectiva del problema.
Por favor no renuncies a tu vida sexual! No dejes que la vergüenza condicione tu vida íntima, si deseas comenzar una terapia sexológica, reserva hoy mismo tu primera sesión haciendo clic en el siguiente botón y recupera tu vida sexual cuanto antes.